Puede que esta noche Rodolfo Chikilicuatre no gane Eurovisión. Aceptémoslo. Tenemos que estar preparados para lo peor y pensar que aquí tenemos mucho cachondeo con la canción, mucho jajejijojú, pero que a la hora de la verdad ya veremos si los rancios votantes del rancio concurso aceptan que un actor con peluca y una guitarra de plástico merezca alzarse con el premio eurovisivo. ¿Acaso me preocupa o me importa? Pues no demasiado, la verdad, pero sería una bajona. Más o menos como estas:
La Bajona: 2007. Se estrena la película, mal y en pocos sitios, y todo el mundo suelta pestes sobre ella. Dicen que es tan mala que ni me he atrevido a verla, por no estropear la ilusión, a pesar de que la tengo por aquí desde hace tiempo. Únicamente he visionado rápidamente algunos fragmentos y sus efectos especiales de chichinabo no han hecho mucho por obligarme a pasar el trance. No obstante, tarde o temprano tendré que enfrentarme a esos temores y malos augurios. Lo sé.
Y próximamente más. Ya saben: Keep watching the skies!
ARGENTO LA CAGA
Dientes largos: Tras muchos, muchos años de espera, Dario Argento se da cuenta de que, capítulos de Masters of Horror aparte, lleva haciendo truñacos desde hace más de una década. Buscando recuperar el éxito y el respeto perdidos, decide apostar sobre seguro y filma la película que sus fans llevan esperando desde Suspiria (1977) e Inferno (1980): la conclusión de la trilogía sobre Las Tres Madres según Thomas de Quincey. Todos nerviosos, rezando por que Argento recupere el pulso de dichas cintas y por que el cutrerío de sus últimas producciones no eche a perder el legado de dos obras míticas como las que la preceden. Vale, y por que Asia Argento vuelva a salir en cueros, que siempre alegra la tarde.La Bajona: 2007. Se estrena la película, mal y en pocos sitios, y todo el mundo suelta pestes sobre ella. Dicen que es tan mala que ni me he atrevido a verla, por no estropear la ilusión, a pesar de que la tengo por aquí desde hace tiempo. Únicamente he visionado rápidamente algunos fragmentos y sus efectos especiales de chichinabo no han hecho mucho por obligarme a pasar el trance. No obstante, tarde o temprano tendré que enfrentarme a esos temores y malos augurios. Lo sé.
MACFARLANE MEETS LUCAS
Dientes largos: Abril de 2008. Llega a las tiendas un espectacular pack que incluye el primer episodio de la sexta temporada de Padre de Familia, un especial de 45 minutos que promete cachondeo a costa de la ya de por sí devaluada saga galáctica de George Lucas (cuya memoria se ha encargado de arruinar él solito a lo largo de los años). Puede molar porque los mejores momentos de la irregular serie de Macfarlane llegan cuando hacen parodias cinematográficas. O eso me parece.
La bajona: Vemos el episodio y descubrimos que es una mierda. Macfarlane es tan fan de Star Wars que más que reírse de ella lo que hace es darle un gran beso en el culo a George Lucas, quien se muestra de lo más contento con el experimento. Si lo más transgresor del episodio consiste en meter una canción de Dirty Dancing, se puede hacer una idea del resto.
La bajona: Vemos el episodio y descubrimos que es una mierda. Macfarlane es tan fan de Star Wars que más que reírse de ella lo que hace es darle un gran beso en el culo a George Lucas, quien se muestra de lo más contento con el experimento. Si lo más transgresor del episodio consiste en meter una canción de Dirty Dancing, se puede hacer una idea del resto.
EL BEN-HUR DE VAN DAMME
Dientes largos: Mediados de los años 90. Jean-Claude Van Damme, subido con el éxito de Timecop, pero tras los pseudopatinazos comerciales (que no artísticos, ojo... y no, no he errado en la expresión) de Street Fighter y Sudden Death, decide que ya es hora de levantar ese proyecto del que lleva hablando unos años y que vende como el Ben-Hur de las Artes Marciales. Supone su regreso al cine de hostias puro y duro, pero no tanto, porque también quiere que su ópera prima como director contenga elementos de aventuras y cine clásico, con un toque más o menos de qualité que viene de la mano de Roger Moore como compañero de reparto.
La bajona: Verano de 1996. Se estrena la película y cuando la vemos nos damos cuenta de que lo único que nos apetece tras el visionado es rescatar Kickboxer y Contacto Sangriento, pero no ver The Quest muchas veces más. Los fans de Van Damme, ya saben, echamos las culpas a los productores: que no le dieron el dinero suficiente para abordar todas las ideas que Van Damme tenía en mente, que el presupuesto tampoco se ajusta a las ambiciones del belga, etc. Que sí, que no está mal, pero lo cierto es que a Jean-Claude se le va todo un poco de las manos y en ocasiones se embelesa en la nada intentando encontrar dramatismo cuando en realidad se acerca peligrosamente a la risa.
La bajona: Año 2004. En la cinta When will I be loved la Campbell se desnuda, pero de lejos. Mal rollo. En 2007 se estrena (en alguna parte) I really hate my job, Neve se atreve a enseñar las tetas de cerca y comprendemos por qué se empeñaba en no mostrarlas. Decepcionaca.
La bajona: Verano de 1996. Se estrena la película y cuando la vemos nos damos cuenta de que lo único que nos apetece tras el visionado es rescatar Kickboxer y Contacto Sangriento, pero no ver The Quest muchas veces más. Los fans de Van Damme, ya saben, echamos las culpas a los productores: que no le dieron el dinero suficiente para abordar todas las ideas que Van Damme tenía en mente, que el presupuesto tampoco se ajusta a las ambiciones del belga, etc. Que sí, que no está mal, pero lo cierto es que a Jean-Claude se le va todo un poco de las manos y en ocasiones se embelesa en la nada intentando encontrar dramatismo cuando en realidad se acerca peligrosamente a la risa.
LAS TETAS DE NEVE CAMPBELL
Dientes largos: 1998. John McNaughton estrena la divertidísima Juegos Salvajes y los filetazos entre Denise Richards y Neve Cambell nos ponen a todos cardíacos. Pero, oh, sólo la primera se atreve a mostrar sus encantos.La bajona: Año 2004. En la cinta When will I be loved la Campbell se desnuda, pero de lejos. Mal rollo. En 2007 se estrena (en alguna parte) I really hate my job, Neve se atreve a enseñar las tetas de cerca y comprendemos por qué se empeñaba en no mostrarlas. Decepcionaca.
Y próximamente más. Ya saben: Keep watching the skies!