(Savage streets. Danny Steinmann. Estados Unidos. 1984. 94 minutos) Sobre el papel, esta película tiene motivos suficientes como para generar nuestro interés inmediato o, como mínimo, despertar nuestra curiosidad: Linnea Quigley hace de chica sordomuda que es violada por un grupo de maleantes, su hermana Linda Blair se viste de cuero, coge una ballesta y sale a las calles a vengarse. A eso añádanle escenas de ducha a tutiplén, peleas de chicas, Blair desnuda y villanos con malas pintas, dirigidos por el responsable de Viernes 13 parte 5... y ese cartelaco que ven a su izquierda. Algo con estos mimbres tenía que molar, ¿verdad? Pues no. Calles salvajes es una de esas películas que funciona mejor en el recuerdo o en nuestra imaginación que durante su visionado, porque si bien supone un regalo visual para los que disfrutamos del erotismo sórdido y para nada sutil (la protagonista marcando pezones por la calle en su primera aparición), de las pesadillas urbanas con vengadores y de la estética canalla de los años 80, también hay que admitir que presenta unos bajones de ritmo alarmantes y una falta de intensidad que echan por tierra toda la fuerza que tenía la premisa. No le negaré su valor histórico/pajillero, pero realmente esta vez no hay mucho que reivindicar.
2 comentarios:
Estoy de acuerdo. Linda Blair es la única razón por la que recuerdo esta película, pero Steinmann es de esos con un must, y no es Viernes 13 5, que tiene gracia y es respetable, sino The Unseen, una pequeña obra maestra. Deberías verla. La calidad está ahí (si te interesa, dímelo y te paso un dvdrip excelente, nada que ver con el satrip de baja calidad y en 4:3 que rula por los foros habituales).
Pues sí, Sergio, claro que me interesa. Esa se tituló aquí 'Gemidos en la oscuridad', ¿no? Pásame el enlace cuando puedas.
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